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POR UNA COMUNICACION POPULAR

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jueves, septiembre 03, 2015

REFUGIADOS

REFUGIADOS

Sin duda es una herida abierta en el alma de la humanidad. Las imágenes que recorren el mundo son desgarradoras. Tal como nos tienen acostumbrados, los grandes medios replican hasta el infinito las lamentables consecuencias de causas que permanecen casi ocultas.
¿Qué es lo que obliga a habitantes nacidos en una tierra a tener que abandonarla con lo puesto y presas de la desesperación?
Las guerras, la miseria, la pobreza, las epidemias, el fundamentalismo.
La gran pregunta es ¿Quién provoca esos flagelos que no son causa de la naturaleza?
Precisamente la respuesta a ese interrogante los medios que forman la opinión mundial no la responden.

Hay una articulación perfectamente equilibrada entre quienes deciden la invasión de terceros países para apropiarse de sus riquezas con cualquier excusa y quienes pergeñan los planes económicos que deben regir el planeta como si fuera una unidad indivisible. Sin características propias, idiosincrasias particulares y necesidades disímiles, además de sus culturas y costumbres.
Más abajo de quienes esto deciden, están los países y dirigentes que siguen a pie juntillas las decisiones políticas, económicas, sociales y “humanitarias” de quienes han provocado semejantes consecuencias. Como si ignoraran la realidad de lo que acontece.

Parece que con convocar a la solidaridad mundial ya se lavan las culpas. Mientras las víctimas de la rapiña se cuentan de a millones. Pero para llegar a esa cifra se suman de a un niño, una niña, un hombre, una mujer. Pero si se dice “llegan a doscientos mil los refugiados que no dejan entrar en Europa” pareciera que ya no tienen rostro, ojos, manos, piel, dolor, angustia.

Mientras tanto siguen los ajustes económicos en Europa, las invasiones y guerras en Asia y Medio Oriente, las desestabilizaciones en América y los organismos internacionales integrados por los que toman estas decisiones parecen ignorar que son los causantes de estos ¿genocidios de baja intensidad? Tal vez en algún momento aparezca esta definición de algún experto del primer mundo como propuesta para vaya a saber solucionar qué.

“No te quedes en casa, que si no te atrapa la pantalla”

Daniel Mojica

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