¿Cómo nace un condicionamiento?
Un grupo de científicos colocó cinco monos en una jaula en cuyo centro colocaron una escalera y, sobre ella, un montón de bananas. Cuando un mono subía la escalera para agarrar las bananas, los científicos lanzaban un chorro de agua fría sobre los que quedaban en el suelo. Después de algún tiempo, cuando un mono iba a subir la escalera, los otros lo agarraban y le daban de palos.
Pasado algún tiempo más, ningún mono subía la escalera, a pesar de la tentación de las bananas. Entonces, los científicos sustituyeron uno de los monos. La primera cosa que hizo fue subir la escalera, siendo rápidamente bajado por los otros, quienes le pegaron. Después de algunas palizas, el nuevo integrante del grupo ya no subió más la escalera.
Un segundo mono fue sustituido, y ocurrió lo mismo. El primer sustituto participó con entusiasmo en la paliza al novato. Un tercero fue cambiado, y se repitió el hecho. El cuarto y, finalmente, el último de los veteranos fue sustituido.
Los científicos quedaron, entonces, con un grupo de cinco monos que, aun cuando nunca recibieron un baño de agua fría, continuaban golpeando a aquel que intentase llegar a las bananas.
Si fuese posible preguntar a algunos de ellos por qué le pegaban a quien intentase subir la escalera, con certeza la respuesta sería:
- "No sé, las cosas aquí siempre se han hecho así..."
¿No les suena conocido?
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Una compañera me acercó estas líneas. Y la pregunta que hace al final me disparó esta reflexión.
Desde los comienzos de la humanidad existe la intencionalidad de dominar, de someter al otro.
También la humanidad ha mostrado rasgos de solidaridad y colaboración.
Simplificando de manera grosera, se puede decir que el objetivo de todas las guerras es someter al vencido a la voluntad del vencedor.
Con el nacimiento del capitalismo las formas de ese sometimiento se van sofisticando y se llega a las guerras cuando otros métodos de dominación y sometimiento no han dado resultado.
Para esas otras formas, el mismo sistema ha ido evolucionando en sus métodos. Pero desde el advenimiento del mundo de las imágenes, los mensajes audiovisuales han sido muy útiles en la formación de ideología (entendiendo esta, como una forma de ver la realidad)
Hemos visto y comprobado, como a través del cine y las series de TV nos han dicho que los japoneses, los alemanes, los indios, los musulmanes son los "malos de la película" frente a los "muchachitos" buenos y rubios que no se despeinaban cuando peleaban. Ahora hay más "realismo" y sangre. Hasta hay una serie "24 horas" que avala la tortura de "terroristas" en defensa del sistema.
Todo ese contexto en el que hemos ido creciendo nos ha ido formando socialmente, junto con la educación que hayamos recibido (en esta sociedad occidental y cristiana)
Esta educación recibida, lo que ha tratado es que nos adaptemos a esta sociedad. Adaptación que implica aceptar las desigualdades como algo natural y casi imposible de modificar. A eso tambien han apuntado, en general, los medios de difusión (escritos, orales, visuales)
A tal punto que muchos creen que si sale en los diarios, lo escucha en la radio y/o sale en TV es LA VERDAD. Para algunos, si no sale en TV no existe. No sucedió.
Esto no quiere decir que todos sin excepción acepten estos condicionamientos. Para quienes no los aceptan existen muchos mecanismos "sociales" de marginarlos (en una época los neuropsiquiátricos para los "diferentes", los "inadaptados", los "antisociales" eran una solución)
En nuestro país el éxtasis en la defensa del sistema sucedió con la toma del poder de la dictadura genocida en marzo del 76.
El sistema de poder demostró lo que está dispuesto a hacer con los que se oponen a él.
El genocidio cometido, tambien ha generado una conciencia diferente, logrando que el temor se internalice en nosotros. Desde siempre el miedo es una forma de sometimiento.
Los medios de difusión tienen una gran responsabilidad al respecto. Mostrando aquello que condice con "su realidad", tergiversando lo que puede, manipulando u ocultando y falseando los datos de la realidad.
Esto no es producto de la paranoia, como algunos defensores del sistema de poder pueden alegar.
Hay una película que trata de manera magistral la manipulación, la creación de una realidad inexistente, la tergiversación y la mentira. Se llama "Mentiras que matan" con Robert de Niro y Dustin Hoffman, entre otros.
Hoy no están dadas las condiciones para que suceda otro Marzo del 76.
Por eso los medios del monopolio uniformativo apelan a todos los recursos disponibles para manipular la información, ocultar, resaltar, omitir, falsear, mentir.
Hoy no hace falta sacar los tanques a la calle. Con tener un multimedios alcanza.
Pero si se vieran en la necesidad, no dudarían un momento para ir creando las condiciones para un nuevo Marzo del 76.
Tal vez ya hayan comenzado.
Pero mientras haya conciencias que reivindiquen la memoria. Mientras haya jóvenes que tomen la política en sus manos para transformar la realidad. La lucha por una sociedad más justa e igualitaria no está perdida. Todo lo contrario.
Hoy estamos frente a un momento histórico. Diría casi fundacional por el contexto latinoamericano de gobiernos parecidos a sus pueblos.
No dejemos pasar esta oportunidad
Daniel Mojica
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