ENSEÑANZAS DE LAS PASO
Las elecciones del Domingo 9 de Agosto dejaron muchas aristas para el análisis. Las más transitadas fueron las que se desprenden de los números, los porcentajes, las posibilidades de cada candidato y su respectivo espacio político.
Voy a intentar otro recorrido. Hay ciertos paralelismos con otros momentos históricos. También hay escenarios y personajes que antaño tejían en las sombras y quedaron al descubierto. No por casualidad. Por acciones políticas de un gobierno que no resigna su legitimidad democrática y popular.
En los meses previos al término del mandato de Isabel Martínez, cuando faltaba muy poco para las elecciones que proclamarían a un nuevo gobierno, las fuerzas armadas dieron un ultimátum a la clase política. La dirigencia respondió en boca del máximo dirigente de la UCR “no tenemos soluciones para dar”. Luego se produjo el golpe genocida de 1976. (Nota: El establishment financiero tomó nota que sin represión no podría imponer el modelo económico antipopular e instrumentó a las fuerzas armadas para humillar a “la política” dejando en ridículo a los dirigentes con responsabilidad de conducción de aquel momento.
Primera consecuencia reafirmada por el genocidio: la política no es un buen camino a seguir.
La realidad de los últimos 12 años puso muy nerviosos a los mismos sectores de poder. Porque además de recuperar la política como herramienta de transformación, las medidas implementadas pusieron en escena a los personajes que históricamente permanecían ocultos. Mientras manipulaban, operaban y presionaban para que gobiernos democráticos desde 1983 hasta el derrumbe de 2001/2002 hicieran el trabajo que los factores de poder financiero necesitaban para apropiarse de la riqueza nacional.
De tal suerte que las corporaciones que ayer usaron a las fuerzas armadas, hoy manipulan a la gran mayoría de la dirigencia política de la oposición. El objetivo es el mismo. Vaciar la política y denigrar el rol de los políticos en general. Sólo lo lograron con los dirigentes que ya estaban vaciados de convicciones.
La buena noticia es que al quedar al descubierto y poner en evidencia la incapacidad de quienes eligieron para llevar adelante su modelo expulsivo y dependiente, deben poner en escena a sus propios jugadores. Así debe leerse la propuesta del nuevo presidente de la Unión Industrial Argentina.
Como no podrán imponer un candidato pelele para 2015, se atrincheran en sus organizaciones “de la sociedad civil” para condicionar al próximo gobierno. Como intentaron hacerlo con Néstor Kirchner.
La respuesta, luego de llenar las urnas de votos peronistas, será movilizarse en las calles y las plazas para proteger lo conseguido e ir por lo que falta.
Daniel Mojica
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