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POR UNA COMUNICACION POPULAR

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jueves, abril 18, 2013

LAS DOS CARAS DE UNA MISMA MONEDA

DEMOCRATIZACION DEL PODER JUDICIAL Y LEY DE MEDIOS. DOS CARAS DE UNA MISMA MONEDA


La propia realidad se encarga de manera contundente, de mostrarnos el justo punto de contacto entre dos temas que la sociedad reclama. La plena vigencia de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual y la democratización del Poder Judicial.
El reciente fallo de la Cámara en lo Civil y Comercial Federal, ilumina hasta encandilar la connivencia entre una parte de ese Poder Judicial que se opone a la transparencia, y un poderoso grupo mediático que se niega a cumplir las leyes de la democracia.
¿No basta esta grosera demostración de sumisión de parte de un poder del Estado y un grupo empresario, para darnos cuenta de la absoluta necesidad de democratizar y brindar total transparencia al Poder Judicial?
Los jueces de esa Cámara fueron recusados ante el Consejo de la Magistratura ¿No demuestra esto también la inmovilidad de esa institución y su comportamiento complaciente con ciertos integrantes de la familia judicial?
¿Será por eso que sectores interesados de la corporación judicial, ciertos dirigentes de la oposición y el grupo mediático involucrado, se niegan a que se aprueben las leyes que obligan a publicar las declaraciones juradas de los jueces?
Por eso también, ese conglomerado de personajes, asociaciones y empresas se oponen a los cambios en la elección de los integrantes del Consejo de la Magistratura. Porque atenta contra los negocios corporativos que perjudican a la sociedad en su conjunto.
Por eso también, ese sector del Poder Judicial ha demorado tanto los juicios contra los genocidas militares, civiles y mediáticos.
Porque entre todos forman parte de una asociación de hecho para cometer delitos y proteger a quienes los cometen, en contra del pueblo y del patrimonio nacional.
Como ha venido sucediendo desde mediados de la década del 70.
Pero esta Democracia, madura y conciente que estamos construyendo, va a seguir el camino de ampliar derechos y remover obstáculos que obstruyan la plena aplicación de una justicia legítima e igualitaria.
Es hora de movilizarnos para defender una democracia soberana.
De nosotros depende ser libres o someternos a las decisiones de las corporaciones.
Tenemos en la región sobrados ejemplos de lo que puede suceder si no profundizamos el proyecto nacional en el camino elegido en las urnas por más del 54 % de la voluntad popular.

Daniel Mojica

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