MAGNETO Y CARRIO ¿QUEMAN SUS NAVES?

JUGADA PELIGROSA Los comunicadores a sueldo del sistema mediático desde sus diferentes canales de inoculación, tratan de inventar un enfrentamiento intra peronismo, para resucitar una etapa superada por la realidad. El objetivo es sembrar miedo en cierto segmento de la sociedad y pergeñar una movida desestabilizadora, sustentada precisamente, en el miedo inoculado. Por esta razón, no ha sido un exabrupto periodístico catalogar el golpe de la diputada Camaño de Barrionuevo al diputado Carlos Kunkel, como “una expresión de la lucha entre la derecha y la izquierda peronista”. Simplemente, han instalado el tema. De la misma manera, que señalar que la emboscada en la que fue asesinado el militante Mariano Ferreyra, fue producto de “un enfrentamiento entre sindicalistas”, aporta a la misma estrategia señalada más arriba. En el contexto de la “guerra” que Clarín le declaró al gobierno nacional, se pretende instalar la idea de “luchas entre facciones peronistas”. ¿Con qué fin? El sistema de poder, representado por la corporación mediática, sabe que por el camino de las urnas, es muy difícil que consiga ser gobierno. La fantochada de democracia condicionada, que vivimos desde que recuperamos la democracia en 1983, se acabó en Mayo de 2003. La sociedad, el pueblo, ya no va a tolerar menos derechos y bienestar del que se ha logrado hasta hoy. Por eso el fin de todas estas operaciones y movidas desestabilizadoras, este crear realidades oscuras, este agitar fantasmas inexistentes es generar un clima de miedo y provocar cierto caos. Para generar las condiciones de que cierto sector social, permeable al discurso de las Mirtas y Susanas, vuelvan a sacar las cacerolas de sus bien surtidas cocinas. La demonización de Hugo Moyano y el desesperado interés de asociarlo con Pedraza van por ese camino. La impresentable y desquiciada diputada experta en dinamitar todos los espacios que construye, es la apuesta desesperada del monopolio. Ya que ninguno de los asistentes a la cena donde Magneto les juntó las cabezas a los dirigentes del justicialismo pigmeo más el niño Mauricio, han logrado asomar con números esperanzadores en las encuestas. Así es que ahora vienen a sembrar de minas y trampas caza bobos el terreno, para que cualquiera que pise ese terreno sufra las consecuencias mediáticas. Cómo le ha pasado a las diputadas Cinthia Hotton y Elsa Álvarez. Y a toda la bancada del radicalismo, que no supo, no quiso o no pudo eludir la estrategia de tierra arrasada que propuso su ex correligionaria. Tanto los directivos del monopolio como esta desangelada diputada, son capaces de cualquier cosa. Si fueron capaces de quedarse con Papel Prensa torturando a sus legítimos dueños. Si fueron capaces de apropiarse de criaturas de padres recién masacrados. Si fueron capaces de decir que los hijos de Ernestina “son hijos nuestros” y que “estamos a favor del monopolio Clarín”. Si fue capaz de jurar por las actas de la dictadura genocida. ¿Qué no son capaces de hacer movidos por el odio y el temor de terminar en la cárcel por ser cómplices del genocidio? No contaban con una sociedad y una juventud comprometida y consustanciada con el modelo de país que hemos ido construyendo de la mano de esta democracia cada vez más libre, cada vez más soberana y camino de ser cada vez más justa, que hoy conduce la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Pero no por esto, deja de ser una jugada peligrosa. Daniel Mojica