Un espacio para el cambio desde la política y la cultura. Correo: danielmojica@cuestioncultural.com.ar
jueves, noviembre 18, 2010
BANALIZACION Y VIOLENCIA LA PROPUESTA OPOSITORA
LAS CORPORACIONES PEGARON CON LA MANO DE CAMAÑO
Los que creímos que la banalización de la política, o sea la lógica televisiva de los personajes de la fauna sofovich, encarnada en ciertos políticos. Lógica que llegó al paroxismo en los 90 de la mano de Carlos Saúl y los muchachos de tinelli. Digo, los que creímos asistir al fin de esas caricaturas grotescas, que sólo tienen vida delante de una cámara, descubrimos lo equivocados que estamos.
Al lamentable espectáculo que protagonizaron desde la semana pasada las diputadas Carrió, Hotton y Álvarez, esta semana se sumó la violencia de Graciela Camaño de Barrionuevo.
Esta es la Argentina que queremos superar. Ese país de la derrota cultural y del cipayismo dirigencial. El de los políticos que se arrodillan ante el poder. Poder que cierta izquierda extraviada sin remedio, confunde con el gobierno. Con el proyecto nacional y popular iniciado en Mayo de 2003 y que hoy conduce la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Cuando, preciso es decirlo, desde Mayo de 2003 se comenzó a salir de la democracia condicionada por los factores de poder. Las corporaciones que auspician las denuncias inconsistentes de aquellas tres diputadas. Factores de poder que demuestran su impotencia y falta de argumentos en el golpe propinado por la señora de Luis Barrionuevo, al diputado Carlos Kunkel.
Esto, recién comienza.
Porque lo que está en juego es el poder. Está en juego quién gobierna el país. Si lo siguen haciendo las corporaciones que detentaron el poder desde fines de 1975 y que mostraron su verdadero rostro a partir de la genocida dictadura cívica, militar y mediática desde marzo de 1976. Las mismas que siguieron condicionando a la democracia recuperada desde 1983.
Esto recién comienza, porque hay intereses poderosos de por medio. Porque para que haya distribución más justa de la riqueza, los que más ganan tienen que repartirla entre aquellos que la generan. Los trabajadores.
Sucede que a esas corporaciones y a sus socios furtivos del mundo financiero, no les conviene un país que hace del desendeudamiento una política central. Porque se pierden el filón de las “negociaciones de la deuda externa” con su secuela de “asesores” y comisiones que nos hundieron en la hecatombe que estalló en el 2001.
No les conviene que haya desocupación en baja. Porque se pierden esa muchedumbre haciendo colas por un trabajo, que deterioran el salario. Además de la condición humana.
Esto recién empieza, porque el poder no se regala. Se conquista.
En eso estamos, el pueblo en general y los trabajadores en particular, en recuperar el poder que nos fuera arrebatado y que empezamos a reconquistar desde mayo de 2003.
Por eso no vamos a dar ni un paso atrás. Por eso apoyamos a nuestra presidenta. Por que esto que estamos viviendo hoy es producto de la lucha en la que cayeron 30 mil compañeros.
Esa es la bandera que levantamos, a la que le sumamos el rostro de Néstor.
Por una patria justa, libre, soberana y profundamente latinoamericana.
Cristina conducción para la liberación.
Daniel Mojica
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