La historia fue lavada después de septiembre de 1955. Había que borrar superestructuralmente todo vestigio del peronismo, a la par que destruir toda su obra económica y social. Aquél 16 de junio se inauguraba la larga lucha popular que mantuvo la Resistencia contra los antipueblo, los que deseaban integrar el Fondo Monetario, los que otra vez condenarían a los "grasitas", "cabecitas negras", el pueblo trabajador, a volver al sitio del que -según ellos- nunca debieron haber salido. Mucho odio cayó en forma de bombas sobre la ciudad de Buenos Aires, sobre la plaza que el pueblo peronista había conquistado como espacio social y político. TOdo el odio se amparó en la figura de Cristo para bombardear al pueblo y terminar con la vida de Perón. Son las fuerzas reaccionarias, las que se opusieron y se oponen al proyecto nacional y popular. El relato corresponde al libro sobre la vida del Mayor Bernardo Alberte.
portada de diario de: http://diarioshistoricos.blogspot.com/2008/11/bombardeo-la-plaza-de-mayo-junio-de.html
"La primera bomba cayó a las 12.30 aproximadamente. De inmediato la infantería de marina que estaba apostada en la zona del puerto atacó la Casa de Gobierno. Llegaron hasta la vereda del Ministerio de Asuntos Técnicos, calle de por medio, pero no se atrevieron a asaltar la casa, pese a que en ese momento no había más de cuarenta granaderos que se defendían como leones. Los manes del Gran Capitán los estaban protegiendo e inspirando. La llegada de la sección de tanques de este regimiento puso en fuga a los infantes.
Los actos de heroísmo fueron innumerables. EL valor demostrado por los integrantes del Regimiento de Granaderos a Caballo es digno de una mención especial. No se intimidaron por el bombardeo y el ametrallamiento desde los aviones a reacción y con sus armas antiaréreas, inapropiadas para esta clase de combate, intentaron por todos los medios de repeler el ataque. Murieron varios soldados, casi todos de la Sección antiaérea, algunos degollados por las ombas y hasta por los proyectiles de los aviones. Así defendieron la Casa hasta que sus mismas armas quedaron inutlizadas por el ataque.
[...]
Afuera las tradicionales palomas de la plaza vuelan por centenares, aterrorizadas. Los aviones ametrallan las paredes aventanadas del rascacielos del Ejército. El teniente coronal Oscar Cogorno resulta herido en su despacho del décimo piso. Quieren matar al general Perón, es la noticia que corre. Es el 16 de junio de 1955.
Entre los aparatos atacantes hay Gloster Meteor de la Aeronáutica. Pero los más son cazas GLen Martin y Catalina pertenecientes a la Aviación Naval, con base en Punta INdio, a 80 km de Buenos Aires. EL edificio del Ministerio de Marina forma un triángulo casi perfecto con la Casa Rosada y la sede del Ejército. Atrincherados en aquél, los sublevados hacen fuego contra todo lo que se mueve en l azona. Desde los otros dos les contestan. En el medio queda una tierra de nadie, la PLaza COlón, amplia explanada que separa las tres moles de cemento. Entre un paisaje sembrado de cadáveres, vehículos calcinados y cables caídos, justo sobre una diagonal imaginaria de unos 300 metros que el ojo puede trazar entre la Rosada y la sede naval, y dentro de una plazoleta que alberga el monumento al bilbaíno fundador de la ciudad, semantiene erguido un pequeño árbol, emplazado allí por la colectividad vasca de Buenos Aires. Se trata de un retoño del árbol de Guernica. [Bernarodo] Alberte puede verlo desde la ventana, pero la asociación de ideas se le escapa por completo.[...]"
publicado por Kaid. http://anti-q-carachas.blogspot.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Gracias por dejarme tu opinión. A la brevedad te hago llegar mi respuesta.