sábado, noviembre 30, 2013

UNIDAD NACIONAL - UNIDAD DE ACCION



                   UNIDAD NACIONAL. UNIDAD DE ACCION

Es por demás auspicioso el escenario nacional que va tomando forma en estos diez años de Proyecto Nacional.
Desde el 25 de Mayo de 2003 a la fecha, son muchas las decisiones políticas, que transformadas en leyes y medidas de gobierno, han cambiado no sólo la fisonomía del país, sino el ánimo de la inmensa mayoría de los que vivimos aquí.
No es el objetivo de estas líneas enumerar esas medidas tomadas bajo la conducción de Néstor Kirchner primero, y ahora de Cristina Fernández de Kirchner. Además, se ha hablado y escrito bastante sobre las mismas.
El objetivo de esta nota es un poco más ambicioso, y ojalá contribuya al debate necesario en pos de la Unidad Nacional. Meta explicitada en cada uno de los discursos de nuestra Presidenta.
También es mucho lo que hemos hablado y escrito sobre la genocida dictadura cívica, militar y mediática. Será largo y arduo el camino a recorrer, para que cierren las heridas causadas sobre la piel, el alma y la mente de nuestra sociedad.
Resulta claro que hay una minoría, aunque poderosa todavía, que no está de acuerdo con la idea de la Unidad Nacional. No confundir con “reconciliación nacional”, que es lo que pretende esa minoría, que representa aún, el sistema de poder.
¿Cuál es la diferencia?
Básicamente, el sistema de poder (y los dirigentes que lo representan) pretende “olvidar los errores del pasado” y “mirar el futuro”.
Como si hubiera un futuro que no se apoye en el presente y valore la experiencia del pasado.
En cambio, la Unidad Nacional, supone, en este presente, hacernos cargo del pasado para no repetirlo y construir el mejor futuro posible para la inmensa mayoría.
Hacernos cargo del pasado implica llamar a las cosas por su nombre. La frase “errores del pasado” oculta hechos, nombres y protagonistas que aún hoy son presente. Esa frase enmascara golpes de estado cívico-militares, crímenes, genocidios, negociados económicos, apropiaciones ilegales de empresas.
La dictadura genocida conducida por Videla, Massera y Agosti, con sus grupos empresarios asociados y con la complicidad, acompañamiento y sostenimiento de las empresas dueñas de medios de comunicación, no cometieron “excesos”. Masacraron a una generación de militantes, torturaron, asesinaron, violaron de manera sistemática a las militantes capturadas, se robaron a los bebés nacidos en cautiverio, luego de matar cobardemente a las madres que daban a luz.
Todo esto es lo que han acallado el grupo “Clarín” el diario “La Nación”, los medios audiovisuales y los periodistas y comunicadores que trabajaban en esas empresas. Muchos de los cuales lo siguen haciendo, defendiendo los mismos intereses.
Pero no sólo esas heridas han dejado en el tejido social.
Porque, así como ha sido imprescindible la colaboración de los medios de comunicación y los que informaban desde sus canales de difusión, el ocultamiento de los crímenes de lesa humanidad cometidos, para engañar a la población. También fueron necesarios para inocular en la sociedad las ideas que los genocidas pergeñaron en su plan para someter a los argentinos y convencernos sobre que “somos derechos y humanos”, “el silencio es salud”, “hay una campaña anti -argentina”. Así fueron construyendo la sociedad del “no te metas”.
Poco a poco fueron destruyendo los puentes de solidaridad que la militancia (no sólo la partidaria) supo construir a lo largo de la patria. Porque era muy común que estudiantes de diversas disciplinas sociales se ofrecieran voluntariamente, desde diferentes espacios, a trabajar en barrios humildes, villas de emergencia, y entre las poblaciones más castigadas a lo largo y ancho del país. Allí donde el estado estaba ausente.    
Por eso el ensañamiento contra la juventud.
¿Cuál era el problema con esos jóvenes?
Que llevaban a una enorme cantidad de compatriotas el mensaje de que tenían derechos, y que había que luchar por esos derechos, porque es la única manera de sentirlos propios.
Porque, si bien es cierto “que siempre hubo pobres” eso no quiere decir que está bien que así sea.
Los jóvenes militantes eran el puente de comunicación entre el pueblo y las diferentes organizaciones, políticas y sociales a las que pertenecían.
Ese, precisamente es el puente que destruyeron con el genocidio.
(Un tema para otro debate necesario es el del pase a la clandestinidad de las organizaciones guerrilleras, dejando de esa manera desprotegidos a la inmensa mayoría de militantes no enrolados en la lucha armada)
Puente imprescindible para cualquier política social, de cualquier gobierno. Por eso se sigue, hoy, estigmatizando a la juventud que participa en política y que busca reconstruir esos lazos. Porque hace diez años que hay un estado presente, y eso es lo que molesta al sistema de poder.
Lo preocupante, desde el punto de vista de la militancia, es que ese sistema de poder no ha cambiado de manos. Con el agravante que los grupos mediáticos han crecido en tamaño e influencia.
Estos mismos sectores son los que se oponen con todo el poder de que son capaces, a la idea de Unidad Nacional.
Porque en la medida que la gran mayoría de argentinos tomemos conciencia, que sólo de la mano de esa Unidad Nacional, podemos construir un futuro sustentable para los cuarenta millones que hoy habitamos este suelo. Basados en la igualdad de oportunidades, la igualdad ante la ley, la supresión de privilegios de clase, el respeto a los gobiernos surgidos por el voto popular, con un Poder Judicial que no esté sometido a ese sistema de poder que avaló genocidios, y que volvería a cometerlos, si se dieran las circunstancias.
Unidad Nacional no quiere decir que todos pensemos igual sobre cada cosa, quiere decir que el supremo interés que hay que defender es el del pueblo expresado de manera democrática en las elecciones, como marca la Constitución Nacional.
(Otro tema para debatir, es precisamente el de la reforma de la Constitución Nacional, para crear los institutos válidos y necesarios para una sociedad que no es la del siglo XIX)
Creo que es claro quienes no están de acuerdo con un país libre, independiente y soberano en pos de la Unidad Nacional.
Son los que se ponen del lado de los fondos buitre en su reclamo contra la Argentina (porque no es contra este gobierno que litigan), los que defiende a la empresa Repsol en contra de la recuperación del control de la empresa YPF (que no es una empresa de este gobierno), los que se ponen del lado de Gran Bretaña en el histórico conflicto de soberanía por las Islas Malvinas (que no son de este gobierno), los que van a “la embajada” a proponerse para ser los “virreyes” del colonialismo de turno.
La Unidad Nacional, implica la unidad de acción entre todos quienes queremos la definitiva Liberación Nacional. Por eso me parece un ejemplo digno de destacar la reciente designación, por parte de nuestra Presidenta, del cura Juan Carlos Molina al frente del SEDRONAR. Nombramiento que se produce luego del documento “El drama del narcotráfico y la droga” dado a conocer por la Conferencia Episcopal Argentina, a principios de este mes.
Creo que es un primer paso en el camino de que además de la protesta, el reclamo, la descripción del problema, se aporte una propuesta de solución.
Porque el país tiene una continuidad más allá de los gobiernos que nos demos. Esa continuidad, también debe expresarse en la continuidad de las políticas que han demostrado solucionar problemas concretos.
En la medida que tomemos conciencia como sociedad, que cualquiera que sea el gobierno que nos demos, debemos seguir adelante con el pleno empleo, la no dependencia de los organismos internacionales de crédito, tener socios comerciales y no “patrones”, defender la soberanía, independencia y bienestar de las mayorías, seguir construyendo desde la UNASUR y el MERCOSUR, la CELAC, el ALBA y los organismos regionales que vayamos creando para ser más libres y soberanos, y hagamos sentir nuestra voz y reclamos en las Naciones Unidas. Así, la Unidad Nacional será la semilla de un país mejor que el que recibimos.


Daniel Mojica
  

jueves, noviembre 28, 2013

DESCONCIERTO OPOSITOR



                                DESCONCIERTO OPOSITOR

Parece que el “fin de cicloK” no es tan inminente como anunciaba la corporación mediática y repetía como un coro griego la dirigencia opositora.
Tampoco se vislumbra que haya una “transición” a la vista.
En cambio tenemos un gobierno que sigue conduciendo la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Con oídos atentos, visión estratégica y sentido de la oportunidad.
El desconcierto opositor se hizo evidente hasta para los ciudadanos menos atentos.
Remarcando, por si hiciera falta, la carencia de propuestas viables y argumentos sustentables, de una dirigencia política cada vez más prisionera del guión mediático desde el cual opinan.
Sin contar la incontinencia discursiva de la dirigente que se especializa en destrozar los espacios que crea. Dirigente capaz de lanzar exabruptos a diestra y siniestra sin la menor reflexión. Transitando un terrorismo verbal difícil de digerir para un intelecto normal.
Todo este contexto, demuestra la orfandad de ideas superadoras de parte de esta oposición, y su dependencia de las iniciativas generadas en las usinas mediáticas del desaliento.
¿Qué independencia pueden esgrimir para su hipotética “República declamada”?
¿Cuál es la soberanía que habrán de ejercer?
¿A qué intereses habrán de responder? ¿A los de las mayorías populares o de los “patrones de conciencia” que les dan letra, micrófonos, cámaras y páginas?
Porque no sólo son empresas mediáticas. Tienen además intereses financieros, industriales, agropecuarios, bancarios, petroleros, etc.
¿Acaso no hemos vivido ya, prisioneros de intereses ajenos a los nuestros?
¿O nos hemos olvidado de lo que nos costó “entrar al primer mundo”?
Ese primer mundo al que nos empujaron, son los fondos buitre. Son los intereses que arrasan con Grecia, Portugal, España, Italia, y gran parte de Europa.
Pues bien, a eso quieren empujarnos nuevamente los dirigentes que en los eventos empresarios hablan de “volver a los mercados de capitales”, de “racionalizar el gasto público”. Son los que hablan mal de Aerolíneas Argentinas, son los que denostan la recuperación de los fondos jubilatorios. Son los que volverían a privatizar YPF.
Son los que cuando los vemos por TV decimos “si esos estuvieron en la década del 90 defendiendo las medidas que hundieron el país”, “¿ese no es el que dijo que había que dejar de robar por dos años?”, “¿esos no son lo que estuvieron implicados en la muerte de Kosteky y Santillán?”. 
Lo que pasa es que hoy los rejunta el muchacho de la sonrisa fácil ante cámara. Ese que siendo funcionario del actual gobierno iba a “la embajada” a hablar mal de su propio gobierno. Ante la atónita mirada de los funcionarios frente a quienes se explayaba. Esos mismos funcionarios que no entendían semejante muestra de genuflexión y traición hacia los que lo nombraron funcionario.
En fin.
Es bueno tener memoria.
Para no repetir errores. Para no comprar los mismos espejitos de colores que nos vendieron en los 90. Ayer con patillas federales y caudillescas. Hoy con sonrisas de venta de pasta dental.

    

sábado, noviembre 23, 2013

JORGE MACRI CONTRA LA CULTURA EN VICENTE LOPEZ

En una muestra más de autoritarismo y desprecio por la cultura el intendente de Vicente López Jorge Macri clausuró el Centro Cultural y Social "La Hora de los Pueblos" sito en la Av. Velez Sarsfield 4198 de la localidad de Munro partido de Vicente López.
Desde aquí expreso mi solidaridad para con los compañeros del Centro Cultural, ante esta clausura que deja a miles de vecinos de la zona sin la posibilidad de seguir asistiendo a las decenas de talleres a precios populares  que se dictan en sus instalaciones.
Los compañeros del Centro Cultural "La Hora de los Pueblos" convocan para el día Martes 27/11 a las 17 horas a un FESTIVAL ARTÍSTICO como una forma de repudiar la inaudita clausura y como una forma de RESISTENCIA POPULAR contra la misma.

Daniel Mojica

www.cuestioncultural.blogspot.com.ar

viernes, noviembre 22, 2013

¿QUE ESPERABAN?

                              ¿QUÉ ESPERABAN?

Cuentan algunos memoriosos que a don Hipólito Irigoyen le escribían un diario “especial”. Para que no tuviera contacto con la realidad. Para contarle, tal vez, lo que quería que sucediera. Para disfrazarle la realidad. Era el tan mentado “diario de Irigoyen”.
Frase esta, utilizada para graficar a quienes le construyen “un relato de la realidad alejado de lo que realmente sucede”.
¿Mito o dato histórico? Vaya uno a saber.
Hoy estamos en condiciones de afirmar con un mínimo margen de error, que desde hace un tiempo a esta parte (¿desde el conflicto por la resolución 125?) el grupo mediático que se quedó con Papel Prensa (poniendo en la mesa de torturas a los legítimos dueños) a través de sus múltiples canales de difusión, construyó “el diario de la dirigencia opositora”.
Allí vuelca sus más escabrosos, siniestros e íntimos deseos, de lo que quisiera que suceda en el escenario nacional.
El problema, es que a fuerza de tanto desear, todos (escribas, comunicadores, periodistas y dirigentes) se lo terminaron creyendo.
En ese delirio patológico, arrastraron a muchas personas (lectores, oyentes, televidentes) a un mar de odio irredento. Inoculado a conciencia y buscando concretar esos oscuros deseos.
Pero, esta semana, la realidad se les vino encima.
¿Por qué?
Porque Cristina Fernández de Kirchner volvió, luego de su operación y reposo, con más fuerza, con las mismas convicciones y con la profundización del Proyecto Nacional, explicitada en cada línea de su discurso.
Porque la Presidenta retornó fijando agenda nuevamente, al centro de la escena política, enviando mensajes hacia diversos destinatarios. Y más hermosa que nunca.
¡Qué bien le sentó el descanso!
Como siempre, leyó acertadamente los datos de la realidad y planificó la estrategia que esperábamos quienes la elegimos (y la volveríamos a elegir).
Los que queremos ir por todo lo que falta. Por más empleo sin distinción de edad, por más inclusión, más industrias, más soberanía, más independencia. Más Patria para todos y todas.
Una vez más, hizo un claro llamado a la unidad nacional. Poniendo de relieve por enésima vez su talla de estadista.
¿Qué esperaban los que escriben y consumen “el diario de Irigoyen”?
¿Que suscribiera los enunciados vacíos de contenido, que traicione el mandato de quienes la elegimos?
¿Que vaya en contra de sus convicciones y del rumbo acertado por el que conduce los destinos de la Nación?
¿Que ponga en práctica las políticas que están destruyendo a varios países de Europa?
Hago un humilde llamado a la reflexión a quienes, aún en medio de la confusión que siembran los profetas del odio, a los que tienen sanas dudas y no concuerdan con alguna de las medidas del actual gobierno. Piensen, por un momento cómo estaban hace diez años y que futuro veían para ustedes, sus hijos y sus nietos. Miren cómo están ahora y cómo ven el futuro hoy. Dejen por unos días “el diario de Irigoyen” y miren su contexto familiar y social.
Luego decidan lo que crean mejor para ustedes y los suyos. Pero sin odio, por favor.
Los abrazo a todos y todas.

Daniel Mojica

   

sábado, noviembre 16, 2013

APUNTES DESDE EL PERONISMO. A DIEZ AÑOS DE SU RECUPERACION

APUNTES DESDE EL PERONISMO. A DIEZ AÑOS DE LA RECUPERACION

Estamos transitando una etapa decisiva del Proyecto Nacional. A dos años del cumplimiento del segundo mandato constitucional del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, está en juego la continuidad del proyecto iniciado el 25 de Mayo de 2003. Nada más y nada menos.
Luego de diez años de gobierno popular, es bueno analizar desde una mirada militante, dónde y cómo estamos. Para evaluar lo realizado y dimensionar las tareas de los próximos dos años. Y más allá.
Este proyecto iniciado por Néstor Kirchner, además de recuperar el rol del Estado como regulador de las relaciones entre los distintos actores sociales, y la autoridad presidencial, recuperó y amplió derechos. Puso en acto las históricas banderas que marcaron la esencia del peronismo: la soberanía política, la independencia económica y la justicia social. Recuperando también la autoestima nacional e individual y el espíritu revolucionario del peronismo, que había sido traicionado en largos pasajes de nuestra historia luego del derrocamiento del general Perón. Ese espíritu que marcó el nacimiento del movimiento y que ha sabido escribir las mejores páginas de nuestra Argentina. Porque supo interpretar los reclamos populares es que nació para transformar la patria.
La tarea de los próximos dos años, y para sentar las bases de lo que vendrá luego, es profundizar las políticas instrumentadas en estos diez años e institucionalizarlas. La tarea de la militancia es sembrar en las conciencias de la sociedad la necesidad de que no nos arrebaten los derechos ganados en esta década, porque sería volver al infierno del que hemos salido con inmensos sacrificios.
Debemos estar más unidos que nunca, porque los enemigos del campo popular no se resignan a aceptar la redistribución de la riqueza, la inclusión de los sectores postergados y la pérdida de privilegios que han sido capaces de defender con genocidios. El de los pueblos originarios, el de los gauchos federales representados por Facundo Quiroga y el “Chacho” Peñaloza y el de nuestros treinta mil compañeros y hermanos de militancia. Son los mismos sectores que al verse descubiertos con los documentos que están saliendo a la luz de la última dictadura cívica y militar, se muestran inquietos. Porque, como queda demostrado, el término “cívico” cuando mencionamos a la dictadura genocida, habla de empresarios, banqueros, hombres de negocios que no miraron para otro lado cuando se llevaban a nuestros compañeros, sino que eran cómplices de los asesinos elaborando planes para apropiarse de empresas y negocios ajenos. Con seguridad que no fueron todos.
Pero si miramos hacia adentro de la Asociación de Empresarios de Argentina (AEA) allí confluyen varios, que siguen conspirando contra la democracia libre de condicionamientos. Porque no tenemos que engañarnos, si aceptaron cuando recuperamos la democracia en 1983, ha sido porque sabían que estaban en condiciones de condicionarla y extorsionarla como hicieron hasta el 25 de Mayo de 2003.
Por eso tenemos que tomar conciencia de esta realidad y obrar en consecuencia. Lo que significa que desde la conducción del Proyecto Nacional, Popular y Democrático elegir a los dirigentes más leales y comprometidos con las convicciones que posibilitaron estos diez años.
Desde la militancia, con las mismas convicciones mantener los canales de diálogo con la conductora, que no es otra que Cristina Fernández de Kirchner, para garantizar que continuemos en esta senda hacia la liberación definitiva de la patria.
Porque no avanzar, no profundizar el proyecto es retroceder.

Daniel Mojica


jueves, noviembre 14, 2013

DEFENSA DE LO INDEFENDIBLE (Más Link para video)

DEFENSA DE LO INDEFENDIBLE

Hay ciertos personajes con notoriedad en los medios hegemónicos, que sostienen una extraña teoría. Sería más o menos así: Si alguien en el pasado realizó actos elogiables, por ejemplo haber integrado la CONADEP, o haber denunciado la corrupción menemista, se transforma de manera automática en este presente de cambio de época, en poco menos que un prócer a ser homenajeado. Un ejemplo a imitar. Sin importar que los actos presentes de esa misma persona hoy la ubiquen en las antípodas, que hoy defiendan a corporaciones que sólo pretenden desgastar al gobierno democrático, con actitudes no sólo destituyentes, sino incluso, claramente golpistas.
Llama la atención que quienes sostienen esta peregrina teoría, suelen ocultar hechos repudiables, del personaje que defienden, cometidos previamente a “los actos elogiables”. A modo de ejemplo: Un periodista (hablando de una colega) escribe “…Magdalena Ruiz Guiñazú conversa con Hebe Pastor Bonafini en Marzo de 1984. Le da espacio para que denuncie que los canales del oficialismo se resisten a darle espacio a las Madres de Plaza de Mayo y editorializa con énfasis a favor de que ello suceda…”
Este periodista, “en el país del no me acuerdo” olvidó, cuando en plena dictadura genocida “…una persona como Magdalena (que) debería ser homenajeada…” entrevistó en EE. UU. Al asesino genocida Videla y lo nombró “señor presidente”. ¿Tal vez allí reside “…su valentía durante la represión ilegal, su compromiso con la verdad de lo ocurrido…”?
En fin, “en el mundo del revés, en el país del no me acuerdo” hay periodistas, comunicadores y escribas que trabajan para la empresa que se quedó con Papel Prensa en la mesa de torturas, que creen que Magdalena Ruiz Guiñazú y Joaquín Morales Solá, no hicieron un papelón ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) con la falta de argumentos de la supuesta denuncia que llevaron.
Papelón que quedó en evidencia cuando las autoridades de la CIDH les preguntaron por qué no hicieron la denuncia como correspondía ante la justicia argentina, y el silencio estalló en el salón de la audiencia.
¿Qué habrá pasado por la cabeza de estos denunciantes sin argumentos, cuando una de las funcionarias de la CIDH elogió la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual?
En la defensa que ensaya este periodista, hay una perlita que merece destacarse, escribe “…Imagínese Ud. Que en dos años gobierna el país Mauricio Macri, o Sergio Massa, o Julio Cobos, o Daniel Scioli. Y, entonces alguno de ellos es fastidiado por periodistas como Magdalena, Vítor Hugo… deciden armar un programa donde diariamente se los difama, tergiversa o humilla. Imagínense que, a partir de esas situaciones algunos periodistas… se encuentran con personas que los insultan por la calle, con los argumentos que se difunden en la televisión oficialista. Sinceramente ¿Usted argumentaría que eso es parte de la democracia…que es parte del derecho a la libre expresión o denunciarían el hecho como una persecución…”
Esto que se imagina este periodista ¿no tiene un gran parecido a lo que hace Jorge Lanata desde sus programas, dando letra e ideas a quienes van a cacerolear contra el gobierno nacional y contra Cristina Fernández de Kirchner?
Bueno, tal vez para este periodista sólo sean detalles menores.

Link para ver video de entrevista M.R.Guiñazú a Videla http://youtu.be/TAqLlgKM-Dw

Daniel Mojica


sábado, noviembre 09, 2013

BATALLA CULTURAL. LOS CONSTRUCTORES DE MENTIRAS

 BATALLA CULTURAL. LOS CONSTRUCTORES DE MENTIRAS

Este cambio de época está atravesado por lo que genéricamente hemos dado en llamar “la batalla cultural”. ¿En qué consiste?
De manera muy acotada se puede sintetizar de la siguiente manera: hay quienes quieren sostener una sociedad domesticada y condicionada a parámetros coloniales, frente a quienes pretendemos una sociedad libre, inclusiva y diversa, con igualdad de oportunidades.
Como toda simplificación es incompleta, pero sirve para poner en contexto el accionar de nuevos y viejos protagonistas en esta nueva etapa. Signada por el fallo de la Corte Suprema de Justicia Nacional (CSJN) sobre la constitucionalidad plena de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (LSCA)
Si hablamos de nueva etapa, es porque existieron otras. La anterior comenzó el 25 de Mayo de 2003. ¿Por qué? Porque el Poder Ejecutivo tomó las riendas del Estado y re define su rol, terminando con la democracia condicionada por los poderes mediáticos y corporativos vigentes, desde que la recuperamos en 1983.
Esta nueva etapa no puede comprenderse en plenitud, sino como continuidad de la anterior, que comienza con la asunción de Néstor Kirchner a la presidencia. Además, los que suscribimos junto a Rodolfo Walsh, la continuidad de las luchas populares, no podemos desligar el 25 de Mayo de 2003 del otro 25 de Mayo, el de 1973, ni este del gobierno peronista de 1946 a 1955.
Como tampoco de la resistencia peronista posterior a 1955, ni del genocidio cometido a partir de Marzo de 1976.
Teniendo en cuenta el contexto señalado, se puede comprender la continuidad de la batalla cultural y política del pueblo, con sus avances y retrocesos.
Cada uno de los golpes de estado contra los gobiernos democráticos significó un retroceso del campo popular.
Cada nuevo gobierno democrático es un avance de la lucha del pueblo, pero es presentado por los medios del sistema como un comienzo nuevo, escindido de los anteriores, negando esa continuidad que postula Rodolfo Walsh.
No es casual la estrategia del sistema de poder, desde los medios de comunicación. Es una de las tantas maneras de desmoralizar a los pueblos en su histórica lucha por la liberación.
Para eso cuentan con escribas y comunicadores, que mediante sus tergiversaciones, manipulaciones y mentiras buscan minar el ánimo popular y sembrar confusión.
Uno de quienes cumple esa tarea con cínica pluma es Ernesto Tenembaun. A quien no se le puede negar inteligencia y creatividad a sus intentos de mellar la conciencia de quienes fluctúan en su apoyo al actual proyecto nacional.
Su última columna “Ver para creer” en la revista “ 23” del 31/10/2013 es un claro ejemplo.
Allí, desde una presunta lógica y objetividad, con un cierto barniz del sentido común construido culturalmente desde ciertos medios dominantes, nos brinda su mirada sobre el fallo de la CSJN sobre la LSCA y sus consecuencias posibles.
Voy a transcribir algunos fragmentos “… la CSJN dictaminó que la LSCA …es constitucional…” “…A mi me resultó todo muy extraño. No termino de entender qué es lo tan, tan trascendente…”
A quienes no nos resulta extraño este concepto es a los que escuchamos el diálogo de este periodista con Jorge Lanata, compartiendo que estaban “del lado del más débil” (Lanata) “que es Clarín” (Tenembaun).
Rescato la frase “tan trascendente”. Si no fuera trascendente ¿por qué la desesperación y los furibundos ataques a funcionarios, artistas y periodistas que apoyan la ley, y en especial contra la figura de la Presidenta de la Nación?
¿Acaso no es trascendente hacer que cumpla la ley un grupo empresario que desde 1983 hasta asumido Néstor Kirchner condicionó y extorsionó a todos los gobiernos democráticos?
Esto es lo que festejamos. Que por fin un gobierno democrático se anima a hacer cumplir la ley a quien se jactaba de proclamar que con cuatro tapas de Clarín se podía voltear a un gobierno democrático.
Más adelante, para minimizar el resultado y la alegría popular que generó el fallo, escribe “…Se supone que una lucha de 30 años debe tener un resultado significativo, que el daño a un grupo poderoso tiene sentido si trae como consecuencia un efecto social positivo…”
El resultado positivo se puede percibir a lo largo y ancho del país con la cantidad de nuevas licencias y los miles de horas de contenidos nuevos generados, más lo que vendrá luego de los procesos de adecuación, con el grupo Clarín incluido.
Resalto otra frase cazabobos “…que el daño a un grupo poderoso tiene sentido si…”
El objetivo de la ley no es causar daño a ningún grupo, sino que todos respeten las reglas de juego que establece la LSCA , para que se puedan escuchar más voces.
Luego inserta otra falacia cuando escribe “…En qué cambia un país si Canal 13 pasa de manos de Clarín a la de, digamos, Cristóbal López…”
Tratando de abonar la teoría de que la ley está hecha para favorecer a los amigos del gobierno.
No está definido de qué medios se desprenderá ni quien los licitará. Pero la idea “del daño” al grupo sigue latente en ese concepto que sugiere que la ley está pensada contra sus patrones.
Luego vuelve a remarcar la insignificancia de “los efectos concretos de la ley” y que “me cuesta entender los festejos”.
Que no entienda los festejos, queda claro. Los efectos concretos, además del cumplimiento de la ley luego de 4 años de impunidad judicial, serán, entre otras cosas, que ya no podrá condicionar gobiernos. Salvo que los dirigentes que se subordinan al grupo mediático accedan al gobierno.
Más adelante hace una enumeración de los “productos realmente notables” que puso al aire Canal 13, a lo largo de los últimos años.
Como una velada referencia a que la ley pondrá el ojo en los contenidos de las señales.
Nada ni nadie le va a impedir a quienes conduzcan Canal 13, igualar o mejorar la programación, porque la LSCA no regula contenidos. Seguirá dependiendo de la creatividad de quienes se hagan cargo.

Llegamos aun concepto que me parece medular en la nota “…En estos años tan intensos, muchas personas quedaron atrapadas en una lógica que por momentos me resulta muy ajena. La cosa sería más o menos así. Hay una guerra, que, básicamente enfrenta al gobierno con Clarín. Eso ordena todo. Cada polo de ese conflicto intenta dañar al otro…”
Otra vez la idea “del daño al otro” y de “hay una guerra”.
Es raro que Ernesto Tenembaun se sienta muy ajeno a esa lógica, porque es la que desde el primer momento el grupo intento imponer desde la voz y la palabra de sus empleados mediáticos, como él mismo.
Por lo demás, si hay alguien que “intenta dañar al otro” basta repasar las tapas del diario, las declaraciones de periodistas y comunicadores del grupo y escuchar al showman de los domingos por la noche, para darse cuenta quien quiere dañar a quien.
Además de intentar colocar en un mismo nivel a un gobierno democrático con una empresa o grupo de empresas.
Luego este agudo y astuto periodista. Que intenta inocular en la conciencia de los lectores un blanqueo del grupo Clarín por su rol durante el genocidio, escribe “…Percibo, además que algunas personas creen sinceramente que pelear contra Clarín es como pelear contra la dictadura militar. Es difícil entender como se realiza esa operación intelectual y afectiva siendo tan distintas objetivamente una cosa de la otra…”
Parece que E. Tenembaun ignora la historia reciente de la Argentina , por ejemplo que el grupo Clarín junto con el diario La Nación se quedaron con la empresa Papel Prensa en la mesa de torturas. Tampoco se enteró que como pago a esa entrega, hizo un cómplice silencio obre los crímenes cometidos, robos de bebés, asesinatos de las madres luego de dar a luz, y que titulaba hablando de “muertos en enfrentamientos” para blanquear los asesinatos de militantes.
¿Puede alguien que trabaja con la información, ignorar la participación necesaria que tuvo el grupo Clarín en el ocultamiento de semejante genocidio? 
Clarín fue parte necesaria para el ocultamiento del genocidio del que se benefició como empresa.
A los periodistas que ocultan aviesamente estos hechos y pretenden que Clarín no tuvo ni tiene nada que ver con la dictadura genocida, les decimos que tienen las manos manchadas de sangre, aunque no le guste a Tenembaun.
“Nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio” canta J. M. Serrat.
Tenemos que estar atentos, porque el grupo mediático que logró colocar un Jefe de Gabinete  en el gobierno democrático que asumió el 25 de mayo de 2003 y tiene plumas tan agudas y astutas en la construcción de la opinión pública, si fue capaz de silenciar un genocidio ¿de qué no será capaz si bajamos la guardia  y nos dejamos confundir por los especialistas en revolver el río para que aparezcan los viejos pescadores?
Si bien estamos protagonizando un cambio de época y hemos ganado algunas escaramuzas en esta batalla cultural en curso, no debemos relajarnos pensando que ya está.
Porque esto recién comienza.

Daniel Mojica



miércoles, noviembre 06, 2013

EL PARTIDO DE LA SUMISION CULTURAL

EL PARTIDO DE LA SUMISION CULTURAL

A medida que el Proyecto Nacional y Popular avanza en su consolidación, continúa iluminando segmentos de la realidad. Así, van quedando a la vista de la sociedad en su conjunto los verdaderos rostros de cada uno de los protagonistas de la escena nacional. Expuestos en su real dimensión existencial.
Más allá de los discursos de ocasión y del maquillaje, con el cual los gerentes de imagen y mercadotecnia quieren venderlos. Porque estos personajes, nos ven a los ciudadanos, como clientes y consumidores. Desde que se asumen como productos en venta, más que como dirigentes.
A tal punto llegó el vaciamiento cultural al que se sometieron, desde el momento que aceptaron formar parte del espacio político que ataca a la democracia y sus instituciones. Ese espacio político que no se constituye como partido y elige actuar por fuera de esa regulación legal. Pretendiendo estar por encima de los poderes constitucionales que gobiernan la Nación.
El conductor de esa suerte de partido en la oscuridad, ha logrado que gran parte de la dirigencia opositora renuncie a las convicciones que alguna vez supieron representar. Para seguir con una ceguera temeraria, el guión escrito para ellos, en defensa de intereses y privilegios de terceros. Quienes no dudarán en desecharlos y sacrificarlos cuando sea necesario. Como en la fábula del escorpión y la rana.
Esta dirigencia que se “afilió” al partido de la sumisión cultural, tal vez piense que los millones de compatriotas que apoyamos y defendemos la asignación universal por hijo, la recuperación de YPF, de Aerolíneas Argentinas, los fondos de jubilación, el desendeudamiento, la inclusión social, la industrialización, el matrimonio igualitario, la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, las paritarias, etc., etc., etc. Digo, tal vez piense que acaso dejaremos de apoyarlas y defenderlas luego del 2015.
¿Tendrán la fantasía de que al terminar el mandato del actual gobierno democrático, aceptaremos que el que lo suceda, elimine alguna de las conquistas de estos 10 años?
Si creyeran eso, tendremos que darnos cuenta como sociedad, que al vaciamiento cultural voluntario, le sobrevino el vaciamiento cerebral, a esa dirigencia que aceptó mansamente someterse al relato escrito para ellos. Sólo por eso, deberían quedar moralmente inhabilitados para ocupar cualquier cargo público. Porque ser funcionario público implica trabajar para el pueblo, no para quienes lo someten.
Me viene a la mente una de las fundamentaciones escritas por el Juez Eugenio Raúl Zaffaroni en el reciente fallo que declara la plena constitucionalidad de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual “Ningún estado responsable puede permitir que la configuración cultural de su pueblo quede en manos de monopolios o oligopolios”.
Como pueblo, no nos podemos permitir que dirigentes que aceptan “…que la configuración cultural de su pueblo quede en manos de monopolios u oligopolios…” puedan quedar en condiciones de dirigir los destinos de la Nación.

Daniel Mojica



viernes, noviembre 01, 2013

UNA NUEVA ETAPA EN LA BATALLA CULTURAL

LA CONSTITUCIONALIDAD DE LA LEY DE SERVICIOS DE COMUNICACIÓN AUDIOVISUAL. NUEVA ETAPA DE LA BATALLA CULTURAL

Luego del largo y trabajoso camino en estos treinta años de democracia ininterrumpida, que condujo al reciente fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, culmina una etapa. Pero se abre otra en la continua batalla cultural por la descolonización y liberación nacional. Tal vez más intensa.
En estos treinta años de democracia que estamos celebrando, desde que la recuperamos, los primeros veinte han sido de una democracia condicionada. Condicionada y extorsionada por los genocidas civiles y militares. Luego, sin solución de continuidad, condicionada y extorsionada por los socios y cómplices mediáticos. Quienes ocultaron de manera sistemática, las torturas, robo de bebés y asesinato de las madres parturientas.
Esos medios, que gracias a ser funcionales a las necesidades de los criminales genocidas en el encubrimiento de los delitos de lesa humanidad cometidos, se quedaron con Papel Prensa. Como moneda de pago a tan sangriento pacto de silencio.
Comenzaron así, a construir una versión cultural acorde al objetivo de ocultar, suavizar, tergiversar, manipular y mentir sobre el genocidio cometido. El pasado reciente que aún persisten en negar.
De esa manera, estos medios trabajaron y trabajan en el sostenimiento de la teoría de los dos demonios, la estigmatización de la juventud, de la política y de la militancia en proyectos populares.
Además de sembrar en las conciencias la semilla del olvido y la “reconciliación”.
Estos son los intereses políticos. Pero además, estos medios, como miembros del sistema de poder corporativo, también tienen intereses económicos y financieros.
Basta con repasar, en los primeros veinte años de la democracia recuperada, los discursos de los economistas, analistas y periodistas especializados que nos hablaban casi en estado de éxtasis de “la teoría del derrame”. Antes, durante y después de la profundización del endeudamiento externo.
Poco a poco, estos grupos mediáticos fueron socavando, esmerilando y deslegitimando al primer gobierno de la recuperación democrática. Hasta provocar su salida antes de cumplir su mandato constitucional. Allí comienza el pacto de mutuos beneficios con quien sucedería a ese primer gobierno.
Llegamos a la década del 90. Donde uno de esos grupos mediáticos comienza a transitar los primeros pasos que lo conducirían a transformarse en el más poderoso y diversificado grupo mediático y financiero.
Luego de conseguir todo lo que se propusieron durante la década del 90. Hacen lo propio con el siguiente gobierno constitucional, que no tuvo la misma astucia política, ni el carisma de quien lo precedió al mando del Poder Ejecutivo.
Ese gobierno nació de una rara mezcla de dirigentes de derecha con cierta izquierda confundida, que aceptó en su gabinete a un personaje alumbrado en la genocida dictadura. Responsable del crecimiento de la deuda externa, luego en los 90 adalid de la privatización salvaje del patrimonio nacional, y que luego del espejismo de la convertibilidad, mandó a lavar los platos a nuestros científicos. Para recalar triunfalmente como salvador durante el gobierno que tuvo el nefasto mérito de dictar el estado de sitio, para irse en helicóptero, antes de cumplir su mandato y luego de reprimir y matar a decenas de manifestantes.
Lo que vino después, el desfile de efímeros presidentes provisionales, también le sirvió al multimedio del gran diario argentino, para conseguir que no lo remataran por sus deudas. Una demostración más de que “a río revuelto ganancia de pescadores”. Sobre todo cuando son los pescadores mismos los que revuelven el río.
Así llegamos a las nuevas elecciones presidenciales.
Desde el 25 de mayo del 2003 la realidad cambió sustancialmente. Porque la democracia dejó de estar condicionada. Aunque las extorsiones siguieron, el gobierno elegido hizo valer su palabra y demostró que no dejó “…sus convicciones en la puerta de entrada de la casa de gobierno…”
La toma de decisiones volvió a su lugar natural: la casa de gobierno.
El ya constituido como grupo mediático monopólico, ejerció su poder dominante con prácticas mafiosas. Luego de un corto período sin grandes enfrentamientos con el nuevo gobierno democrático. Llega un momento crucial en la batalla cultural, que tal vez se mantenía como solapada. En el año 2008 se produce la recordada votación por la resolución 125. A partir de entonces se produce un sinceramiento de las reglas de juego. Aparecen de manera más clara a los ojos de la sociedad toda, los dos proyectos de país. El país para pocos que tiene como estandarte “la libertad de prensa”, el “periodismo independiente”, “olvidar el pasado” y “el campo es la Argentina”. Enfrentado al país para los 40 millones de argentinos, el país de la inclusión social, de la recuperación y ampliación de derechos, de la reindustrialización y recuperación del patrimonio nacional.
Es el momento en el que caen la mayoría de las máscaras que tapaban el verdadero rostro de quienes fueron socios y beneficiarios del genocidio, donde la hipocresía ya está a la vista de los que quieran verla. Por eso el discurso que se quiere imponer es “olvidar el pasado”. Porque sigue siendo presente hasta que aparezca el último nieto apropiado.
Una nueva etapa de esa batalla cultural, es la promulgación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual. Hecho que produce un nuevo alineamiento en la sociedad. Las grandes mayorías toman partido por la pluralidad de voces.
Es tal el enfrentamiento del grupo mediático monopólico, que sus contactos judiciales logran frenar durante 4 años la plena vigencia, de la ley más transparente y más debatida. Sancionada con amplia mayoría en ambas cámaras, votada no sólo por el oficialismo.
Hizo falta que la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en un fallo contundente y esclarecedor, luego de unas audiencia públicas donde quedó en evidencia la falta de argumentos jurídicos y de sentido común del monopolio mediático, dictara la constitucionalidad de la norma y por tanto la plena vigencia de la misma, para acabar con la disputa judicial. Ya es cosa juzgada.
Ahora comienza otra etapa de esta batalla cultural. Donde el gobierno nacional y las fuerzas del campo popular deben estar alertas a las maniobras de claro tinte golpista que comienza a pergeñar el grupo Clarín. Quien sin tener una plataforma partidaria, ha empezado a jugar como partido político, al que adhieren dirigentes de las diversas fuerzas de la oposición.
Pero como alertara en su magnífica fundamentación de su voto el Juez de la Suprema Corte Eugenio Zaffaroni, el monopolio de la información, la construcción de una cultura hegemónica pone en serio riesgo a la democracia.
A nosotros como pueblo nos toca defenderla.

Daniel Mojica